Durmiendo en un palacio, en el corazón de Lausanne
Actualizado: 29 oct 2020
Cuando elegimos un alojamiento, podemos basarnos en criterios super distintos de acuerdo a qué tipo de vacaciones queremos. Lausanne siempre fue una ciudad que visité en el día, ya que solo queda a 40 minutos de donde vivo.
Es una de mis ciudades preferidas en Suiza y sin duda, si no estuviese acostumbrada a ir caminando al trabajo creo que ya me hubiese mudado. Tiene todo lo que me gusta, un mix de naturaleza, tranquilidad y obvio movimiento. Habiendo nacido en la Ciudad de Buenos Aires, ese movimiento me hace un poquito falta.

Cuando una de mis compañeras nos anuncia el lugar de su casamiento y veo que es a solo media hora de Lausanne, pensé: es mi momento para disfrutar de un fin de semana en la ciudad y vivirla un poco más.
Tuve suerte de que mi fin de semana fue mágico. Lausanne es una ciudad que está muy bien preparada para el turismo, restaurantes de todo tipo, hoteles para todos los gustos y múltiples actividades en una región que todos los días te presenta una experiencia distinta.
En mi caso, elegí el #LausannePalace. ¿Qué decir? Ma si estas leyendo esto, te cuento que cumplí mi sueño de dormir en un palacio.
Para los que no saben, aparte de ser una viajera empedernida que nunca se puede quedar quieta, estudié turismo y hotelería en Buenos Aires. Es por eso que más allá de mi iniciativa de descubrimiento constante, suelo ser bastante crítica con los servicios en turismo. Acá les muestro a la otra Mica, la Mica un poquito exigente, detallista y obsesionada con la atención al cliente.

Desde mi primer trabajo en atención al cliente, siempre defendí la experiencia por sobre la calidad del producto, es decir, desde mi punto de vista, el cliente se puede olvidar si algo salió mal, pero nunca se puede olvidar de cómo lo hiciste sentir. Siempre me creí un poco loca y extremista por esa perspectiva. Sin embargo, este fin de semana comprobé que no estoy loca, que existen hoteles en donde te podes sentir una reina y no por el lujo, sino por como te hacen sentir.
Les pido disculpas si los aburrí, pero sentí necesario escribirles esa introducción para que se den cuenta por que el Lausanne Palace vale la pena, pero si buscas mas que un hotel para dormir, si buscas una experiencia.
Un fin de semana en un Palacio
Llegué el viernes al mediodía y sabiendo que el check-in era a las 15 hs solicité en recepción si podía dejar mi pequeña valija para poder irme a recorrer. Con un poquito de suerte, el chico de la recepción tuvo la iniciativa de consultar si mi habitación podría estar lista antes. Fué donde me dijo que en 20 minutos estaría lista, así que decidí tomarme un café en el hermoso bar que tienen en la entrada.
Junto con ese café tuve la oportunidad de hablar con Sélène, una de las empleadas del hotel que me contaba cómo tuvieron que adaptarse a la situación de la pandemia. Se sumaron múltiples medidas de seguridad, los empleados estan siempre todos con mascara y una limpieza extrema que nos permite sentirnos cuidados.
Mi habitación? Un sueño.
¿Se puede estar en el centro de la ciudad y aparte tener una vista al lago de película? Si Mica, estás en el Lausanne Palace.
En Suiza hay muchísimas opciones hoteleras con vistas de ensueño, sin embargo, la mayoría de ese tipo de alojamientos se encuentran alejados de los centros comerciales, ya sea en las montañas o bordeando los múltiples lagos que tiene el país.
Como la ciudad se fué construyendo sobre terrenos elevados, le permite al hotel estar en pleno centro y así todo tener unas vistas que nos obligan a levantarnos a las 6am para disfrutar del amanecer.
Detalles, detalles y más detalles. Esas pequeñas cosas en donde ves la diferencia de calidad son las que me hacen feliz, las que me dicen: Mica no estabas tan loca, esa calidad y experiencia que vos te imaginabas, existen. Me recibieron con una carta firmada por el director del hotel, una botella de vino y una suite con vista a los Alpes Suizos.
El mismo viernes por la noche, luego de haber disfrutado un poquito de la ciudad y de un viaje en barco por el lago Lemán, me esperaba una rica cena en La Brasserie, el restaurante del hotel inspirado en la cocina francesa. Probé un vino suizo del sur del país y elegí, para hacerle honor a mi origen argentino, una rica carne, que debo decir me sorprendió. En Suiza no se suele conseguir esa calidad de carne a la cual estamos acostumbrados en Argentina y sinceramente, sentí que había vuelto a Buenos Aires por un momento. El origen de la misma no es Argentina, pero claramente es de las mejores calidades que se pueden encontrar en Europa.
Sábado de spa y casamiento.
Cómo por la tarde tenía el casamiento de mi amiga, decidí levantarme temprano para disfrutar tranquila del Spa del hotel y luego desayunar. Sauna, Jacuzzi, baño terapéutico y todo el Spa para mi. Fue una mañana estupenda! Lo que más me gustó del spa fue la apertura horaria que tiene, de 6:30 a 21:00! No sé ustedes pero a mi, cada vez que he ido a un hotel con spa me ponía de mal humor que abrían a las 10 y cerraban a las 18 hs.
En el Lausanne Palace pude adoptar mis horarios como quise y esa flexibilidad me encanta. Creo que es un punto a favor si venís de viaje por trabajo, ya que puedes relajarte antes o después de la jornada laboral habitual.
Por otro lado, en el desayuno me gustó ver cómo adaptan el estilo buffet a la situación del #covid19. Para evitar el contacto al elegir lo que queremos para desayunar, se dispuso todo en porciones individuales y cubiertas con papel film. Por otro lado, las comidas calientes las sirve el mozo para que nosotros no tengamos contacto con los utensilios de cocina.
No creo que haga falta aclarar que cada 1 metro podíamos encontrar desinfectante de manos. Todos los empleados disponen de máscaras y los que manipulaban comida también de guantes.
En cuanto a la cocina, les puedo asegurar que los huevos benedictinos me alegraron el día. No quiero dejar de destacar todas las opciones #glutenfree que tienen a disposición. Para los que no saben, yo llevo una dieta libre de gluten y más allá de la calidad del hotel me cuesta mucho encontrar buenas opciones sin gluten en los desayunos.

Acá nos solo que los tan famosos huevos benedictinos que venían en tostadas, me los adaptaron para que sean libres de gluten, sino que tenían más de 5 opciones de cereales, panes, budines, todo #glutenfree.
Domingo de #YogiBooster
Mi sábado continuó todo el día en el casamiento. Pero mi experiencia en el hotel no terminó ahí. Pude disfrutar del spa el sábado por la mañana y terminar mi fin de semana en Lausanne con una experiencia increíble en el restaurante del hotel #YogiBooster. Un establecimiento 100% vegano, 100% orgánico y con platos diseñados 100% para cada comensal.
El #YogiBooster no tiene menú. Al llegar el chef nos pregunta si tenemos algunas intolerancias y/o alergias, como también nuestras preferencias. La idea del restaurant es brindar un plato distinto cada día, que se basa en los alimentos de estación de ese momento. Es super lindo dejarnos sorprender y ver cómo nos preparan el plato delante nuestro.
Desde los aceites, jugos, sales y absolutamente todo es preparado por ellos mismos.
Si venís a Lausanne y estás buscando una experiencia distinta en el centro de la ciudad, es tu lugar! ¡Animáte!
Mi experiencia no pudo terminar mejor! Si llegan a venir a Lausanne no duden en tener en cuenta al Lausanne Palace como su casa por esos días. Amo cuando un servicio turístico más que un producto es una experiencia, en donde comer, dormir, pasear, disfrutar y todo es único.

Sin duda 100% recomendado! Pasen por mis redes sociales si quieren ver en detalle toda mi experiencia. Espero tengan la oportunidad de visitarlo y sentirse de la realeza por un ratito.
Web #LausannePalace https://www.lausanne-palace.ch/accueil/
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